Ismael Ureña Pérez, un prospecto de béisbol de 14 años, abandonó la pensión donde vivía en Santo Domingo Este y luego falleció por sustancias de rendimiento usadas en caballos que le fueron aplicadas en dicha academia.
El joven le comentó a su madre, Iris Pérez, que estaba siendo maltratado. Preocupada por su salud, su madre lo llevó al médico, donde los análisis revelaron que le habían administrado sustancias para mejorar el rendimiento. Ismael confirmó esta información, aunque inicialmente había evitado contarles a sus padres.
Además, Ismael experimentó síntomas alarmantes, como la pérdida de sensibilidad en las piernas, ojos amarillos y orina de color rojo intenso. Sin embargo, murió a pocos días de ser hospitalizado.
Inoel Ureña (Padre) e Iris Pérez (Madre), con recursos limitados, buscaron apoyo en Santiago con el abogado José Orlando Aracena Peña, de la Fundación Familia Sin Violencia, para obtener justicia. En un video en TikTok, Inoel expresa su dolor, clamando justicia por su hijo, quien, afirma, fue inyectado sin su consentimiento.
Ya hay una denuncia.
Un total de cinco abogados presentaron una denuncia formal en la Fiscalía de Santo Domingo Este contra Yordy Cabrera, exjugador de béisbol y director de la academia donde presuntamente ocurrieron los hechos.
Los representantes legales buscan que se le aplique de inmediato una medida de coerción y que se le imponga prisión preventiva a Cabrera, de 34 años, quien comenzó su carrera como infielder entre 2010 y 2013, luego se transformó en lanzador y jugó por última vez con los Gigantes del Cibao en la temporada 2022-2023.
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